viernes, 16 de diciembre de 2011

Editorial No Solicitada: Mexico, Mamey Mamerto


Hace más de diez años me vi perdido en una tierra un tanto lejana.

En esa tierra, no hablaban nuestro idioma, no comían nuestra comida y ni siquiera se podían dignar a escribir con las mismas letras que escribimos nosotros.

Las calles después de las ocho olían a madera rancia y a grasa de animales que por estas latitudes no nos comemos. Los ojos que se ven de paso en la oscuridad no eran los de perros gruñendo sino los de algún tipo de felino que olvido que lo era para ponerse disfraz de cristiano, o lo que sea que pasara por "hombre civilizado".
Iba caminando hacia donde pensaba que estaba mi hotel, pero cada esquina parecía llevarme a un nuevo rincón en donde todo lo que conocía se veía transformado por el embrujo de la distancia... Hasta que pasé por un bar donde los que teníamos los ojos más redondos entramábamos sin que nos vieran raro.

En este lugar, no se paraba un tipo cada cinco minutos pa cantar lo que una grabadora de karaoke le decía, en las pantallas (cubiertas con malla de alambre) pasaba el fut y más específicamente un partido entre Inglaterra contra Irlanda.

Y ahora si, tío si me hace favor píquele aquí poorque cuando Inglaterra metió un gol... Las botellas de Guiness (y los tarros de su similar chino) empezaron a volar por todos lados (por eso la malla de alambre), pero a pesar de todo, uno se sentía como en casa (si no era Inglés, claro).

Ahí me calleron bien los irlandeses y empecé a apreciar su cultura de los bares, que, pese a quien le pese, es mas chida que la de los ingleses y los alemanes (aunque igual me sigue gustando mas la cantina).

Había una furia contenida que se difuminaba con gracia sobre la barra de madera invitándote a formar parte de una locura que se iba a acabar, como todas las buenas pedas, cuando tu último centavo se fuera a la registradora con el último trago de lo que fuera que pasaran por tequila, whisky o lo que fuera que tomaran como "bebida fuerte" por aquellas latitudes (y lo cagado es que la canción que puse en lo azulito es de un grupo de inmigrantes irlandeses que huyeron de su país para tratar de hacerla en el gabacho).

Después de esa experiencia como que mandas al diablo a U2 y entiendes que un pueblo que se cree sojuzgado, como los irlandeses se creen sojuzgados por los Ingleses (así como nosotros nos sentimos sojuzgados porque cualquier otro pais que haya tocado nuestro suelo), tiene una rabia contenida hasta en lo más recóndito de su identidad y lo saca a chingadazos a la menor provocación.

Nosotros los mexicanos, como nación, tenemos mucha rabia contenida...Por algo somos "mexicanos al grito de guerra".

Y es que ese es el tercer puto, que diga, punto de nuestra santisima concepción de idiotincracia política: la idea de que semos un pueblo al grito de guerra... hasta que nos matan.

El 12 de diciembre de este año, día de la "Virgen de Guadalupe", por por cierto, una banda de inconformes de la normal (escuela de maestros) rural de Ayotzinapa tuvo la brillante idea de cerrar, por sus pistolas, la autopista federal que comunica a Acapulco con la capital del país.

Caray, pues... ¿Por qué no? un tipo allá por el 2006 cerró una de las avenidas principales de la capital del país porque decía que había ganado las elecciones y no pasó nada (salvo el congelamiento de ciertas áreas de la capital), ese mismo año los Maestros tomaron todo el centro de la ciudad de Oaxaca y no paso nada (salvo perdidas millonarias para el comercio y la industria del turismo de la entidad)... La verdad es que no se oye mal cerrar una carretera para que atiendan a mis demandas... Además, puesss.. ¿Qué no se supone que tengo que estar al grito de guerra?

Pues si tío, pero cuando vas a la guerra tienes que tomar en cuenta que igual existe la posibilidad de que te maten... A menos que seas mexicano.

Porque por alguna extraña razón, así como creemos que el mexicano tiene que estar al grito de guerra, también creemos que es inmortal.

Ni con el trauma del 68 ha podido contra este postulado de nuestra idiotincracia en el que juramos y per juramos que  las metrallas no dispararán si nuestra causa es justa.

¡¿Qué es justo por el amor de Dios?!
¿Lo que nos dicta el hambre o lo que nos dijo nuestra mamá o el padrecito o el sentido de venganza que también tenemos harto desarrollado?

Justificamos todas nuestras acciones en una suposición de justicia y, como creemos que lo justo nos hace invulnerables, pues lo hacemos hacemos hasta  barrabasadas de calibre 40 sin creer siquiera en la posibilidad de que las consecuencias de nuestras acciones puedan ser chingaderas aún más grandes que las que se supone que estamos combatiendo... Porque somos machos, porque somos valientes y porque... porque, porque tenemos razón, ¡como chingados no!

Y de pronto... ¡¡BALA!!.
Justificada o no, legal o ilegal, acto de valentía o canallada... El cadaver sigue siendo el mismo.

Es como cuando vamos por la avenida principal y tenemos la luz verde.  Evidentemente tenemos el derecho de paso y podemos ejercerlo, pero ese derecho de paso no nos va salvar de un chingadazo si un cabrón que viene por una calle conexa se pasa el semaforo por el arco del triunfo y nos sale al paso.

En Guerrero, alguien se pasó el semaforo y  las metrallas cantaron.

¡¡PORQUE LOS MEXICANOS ESTAMOS AL GRITO DE GUERRA!!!
SI NO ME PELAN, CIERRO UNA CARRETERA! MI CAUSA ES JUSTA, MI CAUSA TIENE LA RAZON!!!

¡BALA!

"En sangrientos combates los viste,
por tu amor palpiatando sus senos,
arrastrar la metralla serenos, y la muerte o la gloria buscar"

Y de la frase en el himno nacional a una avenida cerca del Centro Histórico en el 68, a una carretera travesando la capital de Guerrero.... Llego la muerte antes que la gloria... Como en la mayoría de los casos.

No voy a decir que me pesa la muerte de los balaceados en la carretera porque para mi, lo que pretendían hacer no tenía justificación mas que en sus propias mentes y yo no leo mentes.  Desde afuera, el hecho es que eran parte de un grupo que detuvo  el tráfico de una importante vía, causaron un daño a la población civil para que el gobierno respondiera a sus demandas (¿porqué me suena esto a "terrorismo"?) y al final hubo dos muertos... Dos muertos por participar en una maniobra para detener una carretera.

¿Es eso válido?

Nos podemos gastar hasta los riñones discutiéndolo pero la verdad es que, válido o no, tiene que parar porque simplemente no esta ayudando a nadie, es un lastre que simplemente nos hace revolcarnos en nuestra propia inmundicia.

Creo que  es hora de decir YA BASTA!

Y no, mi "Basta" no es un clamor para que se detenga el crimen, la corrupción o todas esas cosas que nos están dando en la madre (aunque igual no está demás que ya se acaben); yo digo que "ya basta" de hacer cosas por el imperativo de nuestra propia concepción del mundo, vaya, dicho de otra forma, basta de hacer las cosas "de a por mis güebos"; basta de que nuestra razón, en lugar de ser un medio para lograr una convivencia pacífica y un mundo que haga vomitar de ternura a los cariñositos, sea sólo el medio idoneo para que supure la tinta en los periódicos o la sangre  para el asfalto.

Si no hemos aprendido nada de la historia y seguimos con nuestras mismas ideotincrancias políticas, no podemos esperar que "las cosas cambien".

Pensamos que la venganza es justicia, que nuestros valores (lo que creemos valioso) son lo único que es valioso y que nuestra razón nos inmuniza de pagar un precio por lo que hacemos.

A....¡Basta!... ¡M!

País: México
Flor o Fruto: Mamey
Nombre Propio: Mamerto
Color: Muerto

Nota para los extranjeros que leen esto (porque según el sistema de estadisticas de esta página  el masoquismo no exclusiva de nacionales):  El "basta" es un juego infantil en el que los participantes tienen que decir palabras que empiezan con la letra que se designa cuando un jugador detiene a otro que recita mentalmente el abecedario diciendo precisamente la palabra "basta".

Claro que cada quien puede hacer lo que se le pega su rechingada gana, después de todo, esto es solo un bonche de letras apretujadas en una pantalla, pero si queremos que las cosas cambien, realmente necesitamos entender que el mundo, los días y todo lo que vivimos, son cosas de cambio constante que pueden sorprendernos a la vuelta de cualquier esquina y que si bien es cierto que siempre vamos a tratar de estar por lo menos con los que tienen los ojos como nosotros, no porque tengamos los ojos rasgados o redondos vamos a tener siempre la razón ni vamos a poder madrearnos a quien nos contradiga... Y si no que eso se lo expliquen al chinito que trato de cambiar el canal en el bar aquel (si es que encuentran los pedazos).







3 comentarios:

  1. Pues yo digo que voten por mi en el 2012

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  2. Y no se quien te lee en rusia, quiza el buen Dmitri Medvédev.

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  3. Inche peje! Ya te dije que yo por ti no voto ni aunque me pases a tu hermana (yo que haría con tu inche hermana celuosa?).

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Tu ya leíste mis pendejadas, ahora dejame leer las tuyas.